Proteja a su familia y a la comunidad con la vacuna para la COVID-19

febrero 2, 2021

Por Rigoberto Garcia
Director de Educación para la Salud de Venice Family Clinic

Publicado originalmente en La Opinion – 2 Febrero 2021

Como trabajador de la salud, fui uno de los primeros en recibir la vacuna COVID-19. Cuando recibí la vacuna y las enfermeras que estaban alrededor aplaudían, sentí que las lágrimas corrían por mi rostro. La enfermera que me administro la vacuna, la cual no dolió para nada, me dijo “Adelante, llora. Estás haciendo historia”. Mis lágrimas representaban una mezcla de emociones: alegría, alivio y una sensación de que pronto seremos capaces de exhalar como sociedad. También me sentí avergonzado porque muchas otras personas con mayor riesgo aún no han recibido la vacuna, incluidos miembros de la comunidad Latinx que han estado trabajando durante la pandemia. Han brindado atención a otros, proveyendo servicios críticos y personal en negocios esenciales. Sus trabajos exigían que trabajaran fuera de sus hogares, lo que aumentaba el riesgo de infección para ellos y sus familiares porque a menudo compartían un hogar con la familia extendida. Si uno de ellos se enferma, los otros familiares del hogar deben quedarse en casa y ponerse en cuarentena durante 10 días para asegurarse de que no tienen el virus e infectan a otros. Pocos pueden hacer esto por muchas razones. Solo en el condado de Los Ángeles, la proporción de infección por latinos es 4.5 veces mayor que la proporción de los residentes blancos. Con más de 9,000 muertes relacionadas con COVID-19 en todo el condado de Los Ángeles, casi la mitad han sido latinos.

No soy tan famoso como la representante federal Alexandria Ocasio- Cortez u otros miembros prominentes de la comunidad latina que han recibido la vacuna. Pero como Director de Educación para la Salud en Venice Family Clinic, un centro de salud comunitario sin fines de lucro que atiende a personas necesitadas, quería compartir mi experiencia y alentar a otros a vacunarse para protegerse a sí mismos y a sus seres queridos. Las preocupaciones sobre la rapidez del desarrollo de las vacunas o que las vacunas puedan causar COVID-19 son infundadas. Se tomó años de investigación para desarrollar la tecnología en la que se basan estas vacunas, y estas vacunas no utilizan el virus vivo que causa COVID-19. Me complace decir que no he experimentado efectos secundarios desde mi primera vacuna y espero recibir la siguiente vacuna. Mientras esperamos a que todos se vacunen, continuaré tomando todas las precauciones necesarias para prevenir infecciones y espero que ustedes hagan lo mismo. Por favor, use cubiertas faciales en público. Quédese en casa cuando esté enfermo. Lávese las manos y evite mezclarse con familiares y amigos que no viven en la misma casa.y

Juntos, podemos protegernos y a nuestras familias, y podemos asegurarnos de que todos estén aquí para ayudarnos a celebrar futuros cumpleaños, días festivos y otros eventos durante muchos años. Cuando la vacuna esté más disponible, espero que también se vacunen y hagan historia. Protegernos es esencial para la salud de nuestras familias y el futuro de todos nosotros.

El Venice Family Clinic es un centro de salud comunitario sin fines de lucro que brinda atención a 27,000 hombres, mujeres y niños necesitados en 14 sitios en el condado de Los Ángeles. Para obtener más información, visite venicefamilyclinic.org.